TIJUANA, OCTUBRE 18, 2018.- El esfuerzo físico y mental dio frutos para Natalia Bernal Gallegos, quien hoy se convirtió en una nueva integrante de la División de Rescate Acuático de la Dirección de Bomberos Tijuana, después de cuatro meses de entrenamiento.

Junto con 14 de sus compañeros de la generación 21 de Salvavidas de Mar Abierto y 46 bomberos, Natalia fue reconocida en una ceremonia de graduación que marca el inicio de su etapa como rescatista voluntaria, meta que se propuso desde que tenía siete años, edad en la que asistió al campamento de “Salvavidas Junior”.

“Me fue interesando ser salvavidas, ser voluntaria y decidí meterme a la academia para poder cumplir mi objetivo”, comentó, agregando que a pesar de las dificultades a las que se enfrentó, hoy se siente feliz y realizada por lo logrado.

“El inicio es difícil, pero poco a poco va aumentando tu confianza en ti y a pesar de todo, los esfuerzos van a valer mucho la pena y es muy interesante estar aquí”, indicó.

Invitó a las jóvenes a no dejarse intimidar por los retos que representa ser salvavidas, pues aunque es un poco “pesado”, ser salvavidas es una experiencia que permite superarse físicamente y formar nuevos lazos con otras personas que tienen la vocación de ayudar a la ciudad.

“Conoces a muchas personas, tienes una segunda familia y la estación ya es como tu segunda casa. Lo pesado poco a poco lo vas a poder aguantar y cuando pases las pruebas te vas a sentir muy bien”, expresó.