TIJUANA, JULIO 16, 2020. Aun cuando Baja California cuenta con la infraestructura hospitalaria para hacerle frente al COVID-19, la prevención es la mejor herramienta para mitigar el riesgo y contribuir a cortar cadenas de transmisión del patógeno, del cual todavía no hay cura, ni vacuna.
Así lo expuso, el secretario de Salud del Estado, Alonso Pérez Rico, quien junto al gobernador Jaime Bonilla Valdez, rindió el reporte actualizado del avance del COVID en la entidad, reiterando que Baja California se mantiene en el semáforo rojo de la “Nueva Normalidad”.
En su video conferencia que ofreció al regresar de una agenda que desarrolló por la Ciudad de México, el jefe del Ejecutivo estatal, reconoció que existe un “relajamiento desmesurado en muchas áreas en el estado”, en este sentido añadió: “Lo que tratamos de hacer (como autoridad) es contener, pero no lo podemos parar (la actividad o el movimiento de personas), porque la gente es libre de moverse; el semáforo va a cambiar cuando ustedes digan”.
Indicó que se están dando reaperturas paulatinas en algunos lugares bajo un protocolo estricto, particularmente en Tijuana, una de las ciudades con mayor densidad población que se ha logrado mantener en la emergencia y ha sido referente nacional.
Por su parte, el secretario de Salud en Baja California insistió en el distanciamiento social como una de las medidas más efectivas para inhibir el contagio, así como en el uso del cubre-bocas, especialmente, al utilizar el transporte público; y que de tener síntomas COVID-19, la persona no debe esperar hasta agravarse, de inmediato debe acudir a las clínicas de fiebre, unidades de medicina familiar; o hacer uso del 911 para asesoría u orientación al respecto.
En relación a la infraestructura hospitalaria, informó que la Secretaría de Salud cuenta con el 61% de ocupación hospitalaria, 152 camas disponibles y 90 ventiladores; en el Instituto Mexicano del Seguro Social 69% de ocupación hospitalaria, 182 camas disponibles y 42 ventiladores.
En relación a los casos activos, que es uno de los indicadores con puntual seguimiento, Baja California cuenta con 582. En Mexicali: 279, Ensenada 145, Tijuana, 93, San Quintín 30, San Felipe 25, Tecate 6 y Playas de Rosarito 4.
En el reporte al corte del 15 de julio en curso, informaron que se han estudiado 19 mil 230 casos de COVID-19 en Baja California, de los cuales 11 mil 372 dieron positivo.
En Tijuana hay 3 mil 311 pacientes; 6 mil 117 en la ciudad de Mexicali; Ensenada 1,146; Rosarito 135; Tecate con 261; en San Quintín/ Vicente Guerrero 248 y San Felipe 154; suman 3 mil 781 pacientes recuperados COVID-19.
Se reportan 2 mil 275 defunciones, Tijuana con 974; Mexicali 1,073; Ensenada 135; Tecate 69; Rosarito 13; San Quintín/ Vicente Guerrero con 10 y San Felipe un fallecimiento.