BAJA CALIFORNIA, MARZO 25, 2021.-El glaucoma es una afección en el nervio óptico que produce pérdida de la visión periférica de manera gradual, sin que la persona afectada lo perciba, y no genera dolor, sino hasta que el caso está avanzado debido al aumento en la presión ocular que llega hasta la pérdida de la vista.
“Una persona que padece glaucoma puede llegar a ver halos (círculos o alteraciones) alrededor de las luces de iluminación como los focos y las lámparas, presentar dolor en etapas avanzadas y perder visión periférica, por lo que puede golpearse con objetos”, explicó el director de la Unidad de Medicina Familiar con Atención Ambulatoria (UMAA) No. 36, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en Tijuana, Clemente Martínez.
Indicó que la causa del daño al nervio óptico es el aumento de la presión intraocular y el principal tipo de glaucoma es el conocido como primario de ángulo abierto. Tiene factores genéticos, pero también existen los glaucomas neovasculares, que se presentan principalmente en pacientes diabéticos o en quienes presentaron infarto en la retina, porque se producen unas venitas nuevas, anormales, que bloquean las salidas de líquido que se produce dentro del ojo y aumentan la presión.
El médico agregó que el glaucoma no es curable, pero se puede controlar; existe tratamiento tópico y cirugía, el objetivo es mantener siempre la presión intraocular lo más baja posible, para evitar más daños al nervio óptico, pero no existe una cura definitiva. El glaucoma primario se presenta más en personas mayores de 40 años de edad, afirmó, aunque hay de varios tipos, como los congénitos, cuando el recién nacido presenta la afección.
Indicó finalmente que ante cualquier síntoma, sobre todo en pacientes diabéticos, se debe acudir con su médico familiar para una revisión y, de ser necesario, enviarlos a consulta externa con el especialista.