TIJUANA, ABRIL 15, 2018.- Una imagen en la que aparece el presidente del Consejo Estatal para la atención al Migrante Carlos Mora Alvarez dialogando con el candidato a la presidencia de México, Andrés Manuel López obrador muestra la decisión irreversible de dejar el puesto para retomar la vida política de quien comenzó como regidor en esta ciudad de Tijuana.

Por cierto, recordemos e último discurso pronunciado por Mora Alvarez ante el Consejo que dejaría de presidir:

MEXICALI, BC 12 DE ABRIL DEL AÑO 2018
ANUNCIA SALIDA OFICIAL PARA EL DÍA 1RO DE MAYO DEL 2018.

Queridas amigas, apreciados amigos:
Distinguidos miembros del Consejo Estatal de Atención al Migrante de Baja California.
Antes de cerrar la sesión, deseo hacer un pronunciamiento personal, inscribiendo como antecedente de conclusión y salida de mi encargo como Presidente Fundador del Consejo Estatal de Atención al Migrante de Baja California, este será registrando como formato de mi despedida de titular de este órgano de gobierno, que entre todos los aquí presentes y algunos ausentes hemos tenido la fortuna de fundar para beneplácito y engrandecimiento de nuestra querida entidad.

Desde muy joven aprendí que las instituciones nos son prestadas para honrarlas, para cuidarlas, para salvaguardarlas, más aún, cuando nos son encomendadas para su formación, para su construcción, como en este caso, y estas son tan fuertes, eficientes y sólidas como quien las representa y encabeza.

El 18 de Diciembre del año 2013 recibimos el honroso encargo de parte del señor Gobernador Lic. Francisco Arturo Vega de Lamadrid de presidir esta institución, de formarla, de forjarla.

A partir de ese instante nos dimos a la tarea de constituir, engrandecer y construir con todas nuestras capacidades este órgano máximo de gobierno en la implementación de políticas públicas en materia migratoria, ejercicio que se ha convertido en ejemplo internacional, nacional, estatal y local, además de un acicate constante para todo funcionario de este maravilloso Estado, que se precie de serlo, que suponga serlo o que quiera serlo, independientemente del orden o nivel de gobierno al que pertenezca, porque estamos consientes que las instituciones nos son prestadas, como ya mencione, para hacer por ellas lo mejor de nuestra existencia y creo que no faltó a la verdad, sí aseguró, que en las limitaciones de nuestras posibilidades así lo hemos realizado, quienes conformamos esta institución.

No venimos aquí, en este momento a enumerar resultados, estos ahí quedan registrados, para las estadísticas, la historia y el juicio final de la ciudadanía que es quien nos comanda y que tiene realmente el derecho a juzgarnos.

Quiero concluir resaltando algo que aprendí desde mi más tierna juventud y deseo regalar a las mujeres y hombres que tienen la oportunidad de servir desde un espacio público; las carteras, los encargos, los despachos, las funciones que nos son encomendadas, son mucho, mucho más que nosotros mismos, y tan grandes como el esfuerzo que hacemos y tratamos de hacer y realizar cuando nos las encomiendan, no nos pertenecen, por el contrario, debemos estar a la altura del espacio que se nos encomienda por un tiempo definido, con nuestro máximo aliento.

Me despidió muy orgulloso y satisfecho de los logros que entre todos hemos realizado y consiente que falta mucho por hacer, sobre los cimientos y las bases que aquí dejamos, para el tema que nos hermana magistralmente.
Gracias, infinitas gracias a cada uno de ustedes, por su liderazgo que nos ha guiado a lo largo de estos más de 50 meses.

Hasta siempre! Que sigan los éxitos!

Este discurso tiene una doble lectura: adiós a los migrantes y el retorno a la política nacional.