ABRIL 30, 2018. El CEO multimillonario de WhatsApp, Jan Koum, decidió soltar las riendas del servicio de mensajería debido a diferencias con el consejo de administración de Facebook. El tema es la estrategia que debe seguir la compañía. La renuncia del co-fundador y actual consejero delegado, aparece a un mes de estallar el escándalo por la fuga de datos.
Facebook adquirió WhatsApp en octubre de 2014, por la cantidad de 19,000 millones de dólares, la mayor compra realizada por la plataforma social, hasta la fecha.
Koum, sin exponer motivos, abandona además, su asiento en el directorio de Facebook.
Según información de The Washington Post, la causa son diferencias sobre el uso de los datos personales y el debilitamiento del sistema de encriptado.
“El equipo está más fuerte que nunca y continuará haciendo cosas increíbles“, aseguró el joven empresario ucraniano.
El abandono se conoció al cierre de Wall Street, pero eso no evitó que generara una gran sorpresa. Hasta ahora, los ejecutivos de Facebook cerraron filas en torno a Zuckerberg. Cuando Facebook adquirió WhatsApp, se comprometió a no cambiar su política de privacidad. Pero esa promesa se rompió.
Las críticas hacia la manera con la que Facebook maneja los datos de sus usuarios provocaron duras críticas. La más contundente fue la del otro fundador de WhatsApp, quien dejó Facebook en septiembre. Utilizó su cuenta en Twitter para pedir a sus seguidores que borraran sus cuentas en la red social.
“Hace casi una década que empezamos WhatsApp, llegó el momento para mi de seguir adelante“, dijo Koum. “Me voy en un momento en el que la gente está utilizando WhatsApp de muchas más maneras de las que podrá haber imaginado“, señala.
El abandono de Koum no tuvo un efecto en la cotización de la plataforma social, que está tratando en paralelo de dar con la fórmula que le permita poder monetizar su base de usuarios.
WhatsApp contaba al final de año pasado con 1,500 millones de usuarios, que mandan 60,000 millones de mensajes a diario.
La renuncia de Jan Koum se anuncia en la víspera de que arranque la conferencia de desarrolladores de Facebook en San José (California), que Mark Zuckerberg quiere aprovechar para intentar dejar atrás definitivamente la crisis. La salida del ejecutivo se lo va a poner un poco más difícil.
Con información de El País