BAJA CALIFORNIA, JULIO 19, 2021.-Beber suficiente agua y mantener limpia la zona genital son algunos consejos para prevenir infecciones vías urinarias durante el embarazo, catalogadas como algunas de las consecuencias graves para el bebé debido a que aumentan el riesgo de un parto prematuro o  bajo peso.

 

Rosa María Meda Anaya, ginecóloga del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), explicó que por tratarse de  una infección por bacterias que se produce en el tracto urinario, su presencia pone en riesgo la salud del producto, además de las afectaciones a la madre.

Destacó que una vez que se adquiere  puede desarrollarse en cualquier parte del cuerpo, aunque es más común en la vejiga y la uretra (tubo que trasporta la orina desde la vejiga hacia el exterior del cuerpo).

Advirtió que estas afecciones  pueden desplazarse desde la vejiga a los riñones causando una infección llamada pielonetritis (complicación médica grave más común durante el embarazo ya que puede extenderse a la corriente sanguínea y poner en riesgo la vida de la paciente), por lo que es necesario acudir de inmediato con el especialista para el tratamiento adecuado.

Si la bacteria no se trata durante la gestación,  aumenta el riesgo de parto prematuro y bajo peso al nacer;  ésta es una de las razones por las que siempre en la visita prenatal se realizan los exámenes de orina.

La doctora Meda Anaya explicó que los síntomas incluyen dolor, incomodidad, ardor al orinar y posiblemente molestia pélvica durante las relaciones sexuales;  molestias en la parte inferior del vientre y  necesidad frecuente o incontrolable de orinar.

“La actividad preventiva más efectiva es acudir con su médico familiar durante todo el embarazo para  cumplir con el control prenatal, evitar enfermedades y detectar y tratar cualquier complicación durante el embarazo”, comentó la doctora Meda.

Recomendó algunas medidas para reducir la probabilidad de contraer infecciones como  beber  agua diariamente (8 vasos como mínimo), no ignorar las ganas de ir a orinar y vaciar completamente la vejiga; mantener el área genital limpia con jabón suave y agua, evitar los productos de higiene femenina y los jabones fuertes que puedan irritar la uretra y evitar las duchas vaginales.