TIJUANA, SEPTIEMBRE 6, 2020.- Hábitos comunes en la vida moderna como introducir objetos para rascarse o extraer la cerilla, pueden provocar problemas de audición irreversibles desde temprana edad.

 

Pablo Robles Noriega, director del Hospital General Regional (HGR) No. 20 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tijuana, explicó que la sordera se divide en dos etapas: pérdida parcial o total de la audición.

 

Las causas pueden ser por herencia o alguna enfermedad que en algunos casos el paciente no se da cuenta, debido a que pide que le hablen más fuerte y escucha la radio o televisión con volumen más alto de lo normal.

 

Indicó que la sordera parcial se manifiesta cuando existe una leve capacidad auditiva, necesitando de algún aparato para que mejore, aunque no de manera indispensable y, por lo general, se presenta por el desgaste que sufre el oído conforme a la edad.

 

Agregó que la pérdida auditiva mixta se presenta con la afectación en el oído externo e interno, por daños en el núcleo del sistema nervioso central, provocados por golpes fuertes en la zona del oído.

 

 

El doctor Robles agregó que otras causas son cuando la madre del paciente padeció rubeola durante el embarazo, lesiones en el oído externo, malformaciones, infecciones en el conducto o lesiones obstructivas, y tumores.

 

Las infecciones son más comunes en bebés y niños pequeños, con presencia de dolor, fiebre e irritabilidad; las lesiones se pueden deber al exceso de ruido muy fuerte o alguna medicina.

 

Indicó que en caso de que los adultos presenten dolor en la parte auditiva puede deberse a un problema en la articulación de la mandíbula, dientes o garganta llamado dolor referido, porque está ubicado en otro lado pero se siente en el oído.

 

Recomendó que si padece dolor de oído, coloque una compresa fría en la parte externa por 20 minutos para reducir el dolor, masticar puede ayudar a aliviar el dolor y la presión de una infección, en el caso de los niños se recomienda que no sea goma de mascar porque representa un peligro de ahogamiento.

 

Descansar en una posición erguida en lugar de acostarse puede reducir la presión en el oído medio, las gotas se pueden usar solo en caso de no existir ruptura del tímpano y se debe acudir con el médico familiar, en caso de persistir las molestias.