TIJUANA, EP, 24/03/2018.- Al señalar que han logrado identificar al 15 por ciento de personas que ingresan a los CERESOS del estado, pero que fueron liberados al entrar en vigor el Nuevo Sistema de Justicia Penal (NSJP) el licenciado David Limón Grijalba, Subsecretario del Sistema Penitenciario, señaló que aunque no hay una medición exacta de la reincidencia, se contempla que es el 85 por ciento de los presuntos delincuentes que vuelven a cometer ya sea el mismo u otro delito, motivo por el que son detenidos por alguna autoridad encargada de la seguridad y recluidos en algún penal de la entidad.

Recordó que desde que entró en vigor el NSJP, los Centro de Reclusión Social se despresurizaron y como ejemplo citó el penal de La Mesa, donde antes contaban con 16 mil 500 reclusos y al entrar en vigor el NSJP se quedaron con 11 mil, aproximadamente, dijo que con el intercambio de información que mantienen entre la Subsecretaría del Sistema Penitenciario con las diferentes corporaciones policíacas y de procuración de Justicia del Estado, han logrado conocer que solamente el 15 por ciento de los nuevos ingresos son de personas que ya se encontraban detenidos con anterioridad, pero volvieron a cometer otro delito y tuvieron que reingresar al penal.

Al asistir como invitado especial del Grupo Político Tijuana que preside Salvador Kayachanián, el funcionario estatal fue homenajeado por la totalidad de asistentes, al saber que el sistema penitenciario ha sufrido un cambio radical, porque desde la época del llamado “El Pueblito”, hoy se ubica en los primeros lugares en cuanto a la infraestructura, sistema de seguridad y respeto a los derechos humanos de los reclusos.

Es importante señalar que para iniciar su exposición, el funcionario, a través de un video hizo una retrospectiva del sistema penitenciario que se mantuvo hasta que se puso en marcha el “Operativo Tornado”, el 20 de agosto de 2002, cuando se trasladaron a 43 reos considerados de los más peligrosos a la ciudad de México, sacaron a 271 mujeres y 70 niños, que se hallaban acompañando a sus familiares que purgaban una condena en el penal de La Mesa.

Asimismo, el video pudo mostrar los trabajos que se hicieron para destruir las celdas de lujo que los mismos internos construyeron con todas las comodidades y que pertenecían a los internos más adinerados, a los que los llamaban “maicerones”.

También se pudo ver los trabajos de la maquinaria cuando destruyeron 170 locales, donde se comercializaba todo tipo de alimentos y otros productos.

Recordó que esa época fue cuando más floreció la corrupción, porque todos los internos mantenían el movimiento monetario, ya que contaban con diferentes concesiones, ya sea para la venta de agua, ‘sodas’ y otras tantas cosas entre las que se contaban las drogas en sus diferentes denominaciones, sistema que desapareció cuando les prohibieron que se manejara dinero en el interior de las cárceles del estado.

El licenciado Limón Grijalba, les dio a conocer que el sistema penitenciario actualmente se rige por siete ejes principales, que son: Derechos Humanos, Marco Normativo Jurídico, Desarrollo Humano del Personal, Reinserción Social, Seguridad Penitenciaria, Infraestructura y Certificación y Acreditación.

También les hizo saber que actualmente el Sistema penitenciario en Baja California, se encuentra en Primer Lugar de Gobernabilidad y sólo se tiene recuerdos de lo que fue el Sistema Penitenciario con Autogobierno, el cual tomó su punto más alto en la época de Luis Echeverría y apuntó que en ese tiempo, la federación se desentendió del financiamiento de los penales en México y se obligó a las autoridades a cobrarle a los internos por todo lo que se les daba.

También dio a conocer que actualmente Baja California ya cuenta con los penales del Hongo, número I, donde se encuentran recluidos reos de mediana alta seguridad; en El Hongo II, se encuentran reos de mediana baja seguridad y en El Hongo III, se le denomina de máxima seguridad, porque ahí se encuentran los reos más peligrosos.

En la sesión de preguntas y respuestas, el licenciado Limón Grijalba, tuvo la oportunidad de platicarles que a nivel nacional y a petición o exigencia de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) se anuló la Carta de no Antecedentes Penales, porque el argumento fue que al quedar en libertad, una persona que había purgado una condena por algún delito, no podía obtener un empleo para subsistir honestamente.

Explicó, sin embargo, que con ello se deja desprotegida a la sociedad y principalmente a los empresarios, porque desconocían que antes habían sido procesados y encarcelados por haber cometido un delito y por eso en la carta de libertad se permitió dejar un antecedente para que al presentarla cuando solicitaban trabajo, quienes fueran a contratarlos pudieran saber a quién estaban empleando.

Informó que el Sistema Penitenciario mantiene vigilancia permanente de las personas que logran su libertad, para saber a dónde se encuentran, qué hacen y si lograron una completa reinserción social, pues recordó que no se cuenta con un sistema como en los Estados Unidos donde les colocan brazaletes con GPS para localizarlos, sin embargo, dijo que por ello a muchos de los liberados el juez les pide que se presenten a firmar cada cierto tiempo.

Sobre la capacitación de los reclusos para que aprendan un oficio y que puedan ser empleados en talleres que algunos penales tienen, dijo que es El Hongo II, donde algunas empresas quisieron invertir para emplear a los internos, con lo que obtienen un salario que les puede servir para la manutención de su familia que los espera ver cuando alcancen su libertad.