Mexicali, B.C., a 10 de diciembre de 2019.- Con el propósito de eliminar cualquier forma de violencia corporal sobre los menores de edad, el diputado priista David Ruvalcaba Flores propuso una reforma al artículo 44 de la Ley para la Protección y Defensa de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes del Estado de Baja California.

La iniciativa fue aprobada por unanimidad, sumándose todos los diputados de la XXIII Legislatura del Estado, para que al artículo referido se le agregue un segundo párrafo y quede como sigue:

“Niñas, niños y adolescentes tienen derecho a vivir una vida libre de toda forma de violencia y a que se resguarde su integridad personal, a fin de lograr las mejores condiciones de bienestar y el libre desarrollo de su personalidad”.
“Queda prohibido el uso del castigo corporal en todos los ámbitos, como método correctivo o disciplinario a niñas, niños o adolescentes”.

David Ruvalcaba se sustentó en una reforma aprobada recientemente en el Senado de la República, la cual prohíbe los denominados castigos corporales, en todas sus manifestaciones, como método correctivo o de disciplina que utilicen los padres, madres, tutores, abuelos y cualquier persona sobre un menor de edad.

Se trata, entonces, de adecuar la legislación local, con la de carácter federal, advirtiendo que en Baja California las estadísticas sobre maltrato infantil son elevadas, y hay que prevenir que sigan dándose ese tipo de situaciones, sobre todo, tomando en cuenta que tenemos una Ley para la Protección y Defensa de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes del Estado.

El legislador precisó que: – Abofetear – Amarrar – Apuñalar – Arañar – Arrastrar – Asfixiar – Condenar a muerte – Dar manotazos – Dar palizas – Dar puntapiés – Encerrar – Envenenar – Estrangular – Flagelar – Golpear – Inmovilizar – Lanzar objetos – Lapidar – Marcar – Morder – Obligar a ingerir productos hirviendo – Obligar a ponerse en posturas incómodas – Pellizcar – Quemar – Tirar del pelo u orejas – Zarandear o empujar, son las formas identificadas de violencia corporal que se aplica sobre los menores de edad.

Aunque no hay cifras precisas, el diputado David Ruvalcaba comentó que, de acuerdo a algunos estudios, casi 4 de cada 10 madres, y 2 de cada 10 padres, sin importar el ámbito de residencia, reportan pegarle o haberles pegado a sus hijas o hijos cuando sintieron enojo o desesperación.

Asimismo, 2 de cada 10 mujeres reportan que sus esposos o parejas ejercen o han ejercido violencia física contra sus hijas o hijos en las mismas circunstancias.
Según los resultados, la proporción de violencia masculina es mayor en contextos rurales que urbanos.

En Baja California, Tijuana, Playas de Rosarito y Tecate es donde tenemos uno de los primeros lugares nacionales en violencia corporal a los menores de edad, por lo que, no hubo ninguna duda del pleno de los diputados del Congreso local, para respaldar la iniciativa presentada por el legislador priista.