TIJUANA, FEBRERO 21, 2019.- Esta mañana comenzó a circular información a medias sobre la llamada “Mega Tormenta que devastaría California” sin considerar que se trata de una posibilidad; mas no un pronóstico. La información mal intencionada y a medias alarmó a un grueso importante e la población por lo que decidimos informar lo siguiente:
Antonio Rosquillas Navarro quien es el titular de Protección Civil en el Estado publicó un estudio realizado en los Estados Unidos sobre esta denominada Tormenta de Arco (Ark Storm) caracterizada por vapores que ingresan masivamente desde el pacífico a California y parte de Baja California, un fenómeno que ocurrió en 1862. No quiere decir que se repita, ni tampoco que no vuelva a pasar.
[wonderplugin_video iframe=”https://youtu.be/MUyVZ_Vpz6s” videowidth=600 videoheight=400 keepaspectratio=1 videocss=”position:relative;display:block;background-color:#000;overflow:hidden;max-width:100%;margin:0 auto;” playbutton=”https://diariotijuana.com/wp-content/plugins/wonderplugin-video-embed/engine/playvideo-64-64-0.png”]
Esta Mega Tormenta que alcanzaría poblaciones de la frontera y en particular para la meteorología no es un tema para espantar a la población, aunque muchos lo utilicen para tal fin. Más bien es motivo de análisis y estudio particularmente en Los Estados Unidos.
En particular los científicos saben que el escenario ARkStorm es un evento de tormenta de invierno prolongado en California que causaría precipitaciones extremas, inundaciones, vientos, daños físicos e impactos económicos.
Este estudio utiliza una revisión de la literatura y un análisis basado en el sistema de información geográfica de las bases de datos nacionales y estatales para inferir cómo y dónde ARkStorm podría causar daños ambientales, liberar contaminación de diversas fuentes naturales y antropogénicas, afectar el ecosistema y la salud humana, y causar impactos económicos ambientales. -Los costos de remediación, responsabilidad y salud.
Los ejemplos de preocupaciones ambientales y de salud plausibles de ARkStorm incluyen mezclas complejas de contaminantes como petróleo, mercurio, asbesto, contaminantes orgánicos persistentes, mohos y patógenos; impactos físicos adversos y de contaminación en los ecosistemas marinos ribereños y costeros; y aumento de la incidencia de problemas de salud relacionados con el moho, algunas enfermedades transmitidas por vectores y fiebre del valle.
Las ciudades costeras, el área de la Bahía de San Francisco, el Delta del río Sacramento-San Joaquín, partes del Valle Central y algunas áreas montañosas probablemente serían las más afectadas.
Este tipo de análisis de detección, junto con las evaluaciones locales de seguimiento, pueden ayudar a las partes interesadas en California y las áreas propensas a desastres en otros lugares a planificar, mitigar y responder a futuros desastres ambientales.
Volviendo a lo que esta mañana manifestó Rosquillas Navarro esa hipótesis fue lanzada por la USGS en 2010, no es nada nuevo, ni es un pronóstico, pero hay que tenerlo en cuenta, porque si ya pasó en 1862, igual podría repetirse.
NOTE LA FECHA DEL REPORTE LANZADO EN 2010.