TIJUANA, JUNIO 16, 2020. El primer fin de semana de reapertura fue un respiro para la industria gastronómica de Tijuana, al lograr una derrama económica estimada en 12 millones de pesos, sin embargo, algunos establecimientos fueron clausurados por no respetar los protocolos, lo cual fue respaldado por la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac).
Así lo confirmó Miguel Ángel Badiola Montaño, Secretario General del Consejo Ejecutivo Nacional de Canirac, quien comentó que más de 200 restaurantes abrireron sus puertas el pasado fin de semana, autorizados por la autoridad acerca del protocolo Mesa Segura.
Sin embargo, algunos de ellos fueron clausurados por no cumplir con algunas condiciones tales como el no contar con el permiso de operación en regla; por no cumplir con el 35% del aforo máximo permitido en comedor; por no respetar la distancia entre mesa y mesa; por vender solo bebidas alcohólicas; por generar disturbios como si fuera un antro y no un restaurante; por tener mesas con más de ocho comensales.
Asimismo, por no cumplir con la sanitización previa a la apertura de todo el restaurante; por no tener termómetro a la entrada; porque algunos meseros o cocineros no portaban los cubrebocas y caretas; por no tener a la vista la documentación que acredita todo lo antes expuesto, sin tener la precaución de llevar las bitácoras de temperatura de sus colaboradores, entre otras cuestiones.
“Queremos que sepan que el estarlos visitando constantemente es para apoyarlos al cumplimiento de las nuevas normas, y con el objetivo de coadyuvar con la autoridad, de hecho, tanto la Dirección de Reglamentos del Ayuntamiento, como la Secretaría del Trabajo del estado, la Coepris y la Secretaría de Salud están implementando operativos en los restaurantes para verificar el cumplimiento de todas las condiciones para su operación”, indicó el dirigente.
Además de aplicar las medidas contempladas en el protocolo Mesa Segura, subrayó, deben tener sus permisos vigentes y no tener laborando a trabajadores de alto riesgo como personas de la tercera edad, diabéticos, hipertensos y mujeres embarazadas.
“Estamos conscientes de que trabajando de la mano con la autoridad los resultados son mejores, y nuestro máximo interés es no defraudar la confianza que nos brindó el gobernador Jaime Bonilla, de poco a poco ir avanzando en la reactivación, pero cuidando en todo momento estos aspectos”, expuso Badiola Montaño.
Agregó que la salud de los comensales y de los colaboradores y proveedores es primero, por lo que la Canirac reconoce el actuar de la autoridad de los tres ódenes de gobierno al clausurar todo aquel establecimiento que no cumpla con esta nueva normalidad.
“Invitamos a todos aquellos establecimientos de venta de comida que se acerquen a la Canirac, estén o no afiliados, para poderlos apoyar, orientar y darles la información necesaria para que puedan reaperturar sus establecimientos sin problemas, cumpliendo puntualmente con el nuevo protocolo de sanidad Mesa Segura”, concluyó el líder restaurantero.