TIJUANA, DICIEMBRE 31, 2020.-A medida que el individuo envejece se presenta una deficiencia de nutrientes sumada a otras enfermedades, por lo que el cuerpo pierde la capacidad de remplazar las células que requieren renovación en los huesos, que se traduce como una baja en la densidad de éstos, incrementando su fragilidad, padecimiento que se conoce como osteoporosis.

El doctor Raúl Ozono Castro, jefe de consulta en la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 8 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), apuntó que esta condición ocurre de manera más frecuente en la población del sexo femenino.

Aunque no presenta síntomas en sus etapas tempranas, detalló, puede manifestarse con dolor localizado en los huesos afectados, además de la presencia de fracturas por traumatismos, movimientos o actividades que comúnmente no la provocarían.

Un signo detectable de osteoporosis puede ser el encorvamiento de la columna vertebral causado por fracturas por compresión, generalmente indoloras, aunque apreciables con dolor y sensibilidad al palpar o en ciertas posturas, indicó el especialista.

La atención de la enfermedad es indispensable para el alivio de las molestias y con esto mejorar la calidad de vida, subrayó, siendo el objetivo principal evitar la limitación motriz del paciente y prevenir fracturas.

Ozono Castro puntualizó que las pruebas diagnósticas están indicadas hacia mujeres mayores de 65 años de edad, personas que hayan sufrido fracturas por un esfuerzo mínimo o inexistente, adultos que sufren de dolor lumbar sin causa aparente o cuya estatura haya disminuido.

La osteoporosis es prevenible y tratable, entre las recomendaciones generales se encuentra la ingesta en niveles adecuados de calcio y vitamina D (encontrado en lácteos, mariscos, vegetales verdes y leguminosas), realizar ejercicio de manera regular, disminuir el consumo de alcohol y cafeína, evitar el tabaco y acudir con su médico a su Unidad de Medicina Familiar para revisiones periódicas.