TIJUANA, NOVIEMBRE 4, 2019.- “Este era un niño, como ustedes, que en la escuela Venustiano Carranza estudió y al paso de los años regresó convertido en gobernador de Baja California”, así se dirigió el Secretario de Educación Catalino Zavala Marquez frente a una audiencia integrada por niños de primaria.

El escenario fue la escuela primara Venustiano Carranza localizada en la Colonia Libertad sobre la calle Aquiles Serdán donde el gobernador, Jaime Bonilla Valdez, acompañado de su esposa Rita Fimbres inició un ambicioso programa denominado “Alimentando para Aprender” una iniciativa que llevará desayunos escolares a los niños de todo Baja California a fin de apoyarles a aprender con el estómago lleno.

La Escuela es el plantel que le dio educación primara al gobernador cuando dice recordar levantarse muy temprano para llegar a la escuela y cumplir con sus labores escolares. Pero la motivación más importante es haber palpado que tenía compañeritos que no tenían alimento en el estómago para comenzar con sus actividades.

“Obviamente vamos a ser un gobierno muy austero”, comentó el gobernador Bonilla, a Diario Tijuana, en entrevista exclusiva para remachar que se va a optimizar el gasto puesto que se invertirá en lo más esencial y necesario en tanto se reducen gastos superfluos: “vamos a ahorrar mucho dinero en esta administración, los desayunos nos van a costar mil millones de pesos al año, pero es una inversión en la salud de los niños”, acotó.

Una inversión en la niñez, agregó, que debimos haber hecho desde hace mucho tiempo, “pero se pierde la brújula”, señaló.

El gobernador Bonilla Valdez agregó que su objetivo es “enderezar esa brújula” y las prioridades para la niñez.

En el evento de arranque el gobernador recibió peticiones por parte de la escuela como dos maestros para reforzar el aprendizaje del inglés, techar la cancha principal, componer el encementado en el patio principal, enrejar la periferia de la escuela que ha sido motivo de robos y otras peticiones que el propio jefe del ejecutivo de viva voz preguntó a los niños si eso hacía falta para escuchar un largo y fuerte “Sí” por parte de la muchedumbre.

Que ninguno de mis niños en Baja California se quede sin desayuno”, concretó más tarde el gobernador para dejar esta frase para la historia de la atención a la niñez en el estado.

Cintya Gisel García Soberanes, la Secretaria de Bienestar en el estado afirmó que la prioridad es el desarrollo físico, mental y emocional de los niños simplemente en pleno respeto a sus derechos pero con la firme convicción de estar sembrando en la niñez un sentimiento de orden, de aprecio y sobre todo de obligación a dar el cien por ciento en sus capacidades para contar con un estado fuerte y de hombres y mujeres comprometidos.

El secretario General de Gobierno Doctor Amador Rodríguez Lozano señaló que este programa es una de las grandes metas que se propuso el Gobernador Jaime Bonilla durante su campaña y se está convirtiendo en una realidad bajo la directriz humanista de un gobernador que pondera el bienestar de la familia y la niñez como una de las directrices de su administración.

Al gobernador le acompañó el Secretario del Trabajo Maestro Sergio Moctezuma quien ponderó el programa de desayunos en el que participa la iniciativa privada con productos cien por ciento naturales y de proveedores de la región.

La historia de Catalino Zavala tiene un mensaje preponderante: cualquier niño de la Venustiano Carranza como de cualquier escuela de Baja California puede aspirar a ser el gobernador y sobre todo el compromiso de regresar a su escuela para construir una mejor infraestructura, pero sobre todo mejorar la condición alimenticia de los pequeños porque este gobernador vivió en carne propia la necesidad y tal vez, de manera acentuada, la pobreza que aún viven muchos niños de Baja California.