TIJUANA, AGOSTO 16, 2019.- Lo que comenzó como una airada manifestación porque fueron retirados de las “casetas” de cobro en autopistas, treinta mujeres y hombres exigieron hablar con el gobernador electo Jaime Bonilla Valdez y, tras una hora de diálogo, se retiraron agradecidos por haberlos escuchado y atendido.
Llegaron en marcha poco antes del mediodía, portando banderas tricolores nacionales y lanzando consignas y reclamos en altavoces; a pocos minutos, el próximo mandatario salió a recibirlos personalmente e invitarlos a pasar a la sala de juntas en Casa Morena, para escuchar sus demandas.
Cada uno de los integrantes del grupo encabezado por el técnico herrero Marco García Valdez, que dijeron pertenecer a la organización liderada por Miguel Mendoza Álvarez (ausente), expresó de viva voz el motivo de sus reclamos, primero porque autoridades federales les impiden volver a “botear” en las casetas.
El gobernador electo Bonilla Valdez les reiteró sus respetos y el compromiso de atender sus apremiantes necesidades, como lo prometió durante la campaña, enfatizando que no está en sus manos “autorizarles” a que sigan “tomando” las casetas, por ser un tema del ámbito federal y se atenta contra el Estado de Derecho.
En cambio, les ofreció incorporarlos a programas de empleo, apoyos sociales, atención médica y medicamentos gratuitos, así como viviendas a quienes carecen de ellas, y hasta una silla de ruedas entregó al terminar la reunión al señor Benito Galván Durán, de más de 70 años de edad.
A mujeres madres solteras también propuso alternativas de apoyo, tanto para ellas como para sus hijos en edad escolar; algunas más dijeron no tener para comer o para comprar medicinas y serán atendidas en sus necesidades urgentes, reconociendo que sus demandas son legítimas.
Adultos mayores, entre los manifestantes, que sufren de alguna discapacidad o desventaja física para desempeñar algún empleo, recibirán temporalmente ayuda económica, en tanto quedan integrados a programas de Bienestar del Gobierno Federal, para lo cual acudieron a la reunión “Servidores de la Nación” a petición del propio mandatario electo.
Durante la reunión, ya en un ambiente de entendimiento y armonía, Marco García Valdez dijo tener en llamada por celular a su líder Miguel Mendoza Álvarez (cuyas siglas MMA portan en sus camisetas) y pidió al gobernador electo que lo escuchara en altavoz, lo cual hizo en clara muestra madurez política.
Terminada la transmisión telefónica, siguió el diálogo con los presentes que se fueron sumando en agradecimiento a las propuestas y los apoyos ofrecidos, de su propio peculio, por quien asumirá la gubernatura de Baja California el próximo 1 de noviembre.
Acordaron no volver a “botear” en las casetas, apercibidos de que estarían incurriendo en afectaciones al tránsito vehicular, pero también a concesionarios y su manejo administrativo, además de que los usuarios de las carreteras de cuota no quedan amparados con el seguro que les otorga beneficios en casos de accidente o requerimiento de apoyo vial.
Como muestra de entendimiento y simpatía, pidieron al gobernador electo Jaime Bonilla Valdez posar con ellos para una foto del recuerdo en Casa Morena, en donde volverán a reunirse periódicamente, para dar cuenta de los avances en sus gestiones y trámites acordados.