TIJUANA, B.C., MARZO 12, 2018. El Teniente Coronel Julián Leyzaola, quien fuera secretario de seguridad en Cd. Juárez y en Tijuana, calificó de “mugrosos” al referirse así a las autoridades gubernamentales al hablar de la inseguridad y muertes violentas en Baja California.
“Son los grandes logros de la administración”, dijo en tono irónico.
“En lugar de llevarnos a ser una ciudad económicamente activa con primeros lugares en inversión, en cultura, nos llevan hacia el quinto lugar mundial en violencia. Es la situación actual de nuestra administración, todo lo que sucede en la ciudad. Definitivamente, es culpa de nuestros gobernantes”.
En Tijuana todos los días nos enteramos de las muertes de pequeños narcomenudistas, pero jamás se escucha de la detención de un capo, de un cabezilla importante, de aquellos que controlan los asesinatos que a diario se cometen.
“No podemos echarle la culpa ni a uno ni a otro”. “Los delincuentes son delincuentes y nada más. Al delincuente hay que combatirlo, al nivel que sea. Ninguna autoridad puede disculparse de no hacer algo, ni puede echarle la culpa a otro. No porque sea competencia federal o estatal, pueden dejar de hacer algo”.
“Cualquier autoridad que tenga la obligación debe combatirlo y otorgar seguridad, para eso les estamos pagando, no están haciendo ningún favor cumpliendo con su labor”.
E insistió: “el hecho de que tengan la justificación ‘estúpida’ de decir que la pelea es entre ellos, me dice que cualquiera puede pelear, vender droga, matar, secuestrar porque las autoridades ¿no se van a meter? ¿porque es competencia federal o estatal?”
“La autoridad tiene la obligación de actuar como autoridad. Todo aquel que no cumple con su deber es corrupto”.
Ante el nuevo sistema de justicia, nuestras autoridades se justifican al decir que hay muchas garantías para los delincuentes. Sobre este tema el Teniente Coronel opinó: “No es el sistema de justicia penal, son las personas que están ahí las que hacen que las cosas cambien para bien, o que empeoren”.
La ciudadanía ha llegado al punto de organizarse, grupos de comerciantes y ciudadanos preocupados por su seguridad, al no encontrar la salida para evitar ser víctimas de la inseguridad, han tomado cartas en el asunto y han decidido por la organización comunal.
Ante este tema, Leyzaola dice: “No debe ser. El ciudadano debe dedicarse a trabajar, a producir, a educar a sus hijos, a mantener su estabilidad como ciudadano. Nosotros pagamos impuestos y le pagamos a personas que no tienen otra cosa qué hacer que darnos las condiciones de seguridad y armonía para estar tranquilos. Son nuestros gobernantes, los que contratamos. Ellos son los responsables de eso. Yo como ciudadano no me puedo dedicar a cuidar de la seguridad, no puedo hacerles su trabajo, aunque entiendo la necesidad y frustración de los ciudadanos”.
“Lo que tenemos qué hacer, es exigirle a estos ‘mugrosos’ que cumplan con su trabajo”.