TIJUANA, NOVIEMBRE 18, 2018.- “Aquí están los 30 pendejos” gritó un hombre en referencia a la amenaza vertida por un hondureño desde Playas de Tijuana este martes 13 de los corrientes cuando los centroamericanos pretendían instlarse en en la zona del malecón, por decisión propia.
Esta es la imagen del sujeto amenazante quien dijo que son 30 mil y que estos “acribillarían” a los tijuanenses.
Cinco días más tarde, este domingo 18 de noviembre, en las proximidades de la Zona Norte de Tijuana, una columna de policías antimotines usan sus escudos para contener a los enardecidos tijuanenses que con los empujones y patadas pretendían romper el cerco policíaco para llegar hasta el refugio donde no solo hay hombres sino mujeres y niños en una proporción de 2 mil 500.
Los manifestantes enardecidos reclamaban a la policía “no defender a esos invasores” (hondureños y salvadoreños en particular que se encontraban a 100 metros de distancia) en la Unidad Deportiva Benito Juárez de la calle 5 de Mayo.
De pronto comenzaron a volar botellas de agua, botes de cerveza, y latas de refresco que se estrellaron en los escudos y cascos de los policías.
Hombres con el rostro desencajado, otros con el rostro cubierto gritaban Fuera! Fuera! Fuera! Aludiendo a los centroamericanos que minutos antes estaban en las calles y había sido regresados de inmediato al refugio temporal para resguardarlos en las instalaciones y no dejarlos salir con el fin de evitar la confrontación. Todos accedieron, dejaron la calle para regresar al refugio temporal no sin antes decir que en ninguna otra parte de México los habían tratado mal.
–No nos quieren!!! Me dijo una señora que se apresuraba a regresar al albergue.
La respuesta en las redes y la transmisión en vivo de Facebook no se hizo esperar y se la dimos casi de manera simultánea con seriedad: “en ninguna parte de México se quedaron, excepto aquí y en ninguna otra parte insultaron o amenazaron más que aquí a los tijuanenses, y en su propia casa”.
Los hondureños mencionaron que tienen identificado al agresor y que es un le llamaron “loco” que no habla por todos. Los hondureños que platicaron con nosotros nos comentaron que quieren paz y no meterse en problemas, además de agradecer por el apoyo brindado.
El grupo y sus líderes tienen identificados a por lo menos 100 de los presentes que “no tienen nada que perder” en virtud de que ya fueron deportados y saben que jamás serán recibidos por lo que incitar, agredir, comportarse mal, para ellos no tiene la más mínima importancia.
Al inicio de este reporte mencionamos que alguien grito: “aquí estamos los 30 pendejos!” Le siguió la exigencia de “Traite los 30 mil…”
-Que nos van a acribillar! A ver cul…ros!!!
Y de atrás de la policía un hombre que los grababa con su celular les gritó para encender aún más la protesta
-Fuera racistas!!!
-Fuera racistas!!!
Así continuaron los dimes y diretes hasta que se fue extinguiendo la protesta paulatinamente.
El presidente Donald Trump tuiteó que la ciudad de Tijuana no está preparada para recibr a los centroamericnos así como tampoco lo está los Estados Unidos:
Debo aclarar que antes en el monumento a Cuauhtémoc se habría citado a una manifestación por la “dignidad” a la que acudieron unas mil personas para exigir respeto a Tijuana y en contra de lo que consideran invasión.
Desde este punto alguien propuso acudir al refugio Zona Norte donde se desarrollaron los acontecimientos arriba descritos.