TIJUANA, B.C., ENERO 10, 2018. Se anuncia el cierre precautorio de las playas en la Zona Costa de la ciudad, debido a las lluvias que se presentan y en seguimiento al protocolo del Comité de Playas Limpias de Tijuana presidido por el XXII Ayuntamiento de Tijuana quien indica que la suspensión durará 72 horas después de que las lluvias cesen en la región.
Lo anterior como medida de precaución ante el arrastre de contaminantes que se da por las lluvias. Es por ello que se exhorta a la población a no acudir a las playas a realizar actividades de recreación acuática de contacto directo.
Cabe recordar que este es un trabajo integral en el que forman parte dependencias municipales, estatales y federales, para salvaguardar la salud pública.
En una notificación recibida por el Instituto de Servicios de Salud Pública de Baja California, y que emite la Comisión Internacional de Límites y Aguas entre México y Estados Unidos, se informa de la suspensión de la planta de bombeo CILA, por lo que ha sido necesario emitir un cierre precautorio de las playas de Tijuana.
Es importante mencionar que de acuerdo a lineamientos establecidos dentro del comité de playas limpias las playas deberán permanecer con cierre precautorio hasta que las condiciones que dieron lugar a la determinación del riesgo hayan cesado.
Los criterios para considerar una playa riesgosa es el conocimiento de una fuente puntual de contaminación en la playa, o algún incidente como pudieran ser la presencia de lluvias en la región, que impacte en la calidad del agua, hasta no confirmarse por resultados de un muestreo.
Por lo que es importante de tener en cuenta que cuando se presentan lluvias en la localidad es recomendable que la población no acuda a bañarse a las playas ya que estas reciben una carga considerable de contaminación por el arrastre del agua a las playas.
La mezcla de efluentes de aguas residuales sin tratar puede representar un riesgo para el bañista, ya que una dosis infecciosa de los microorganismos puede transmitirse no sólo al tragar agua sino al entrar ésta en contacto con la piel, los oídos, ojos, cavidad nasal o tracto respiratorio superior produciendo enfermedades menores, tales como irritación de la piel, infecciones en oídos, ojos y aparato respiratorio, malestar estomacal y hasta diarrea a causa de infecciones gastrointestinales.
