TIJUANA, JULIO 04, 2020. El gobernador del Estado, Jaime Bonilla Valdez, atendió a un grupo de colonos del Fraccionamiento Residencial San Marino, ubicado en las inmediaciones de la carretera de cuota Tijuana- Playas de Rosarito, quienes piden el apoyo para solucionar el problema del derrame de aguas negras en la zona, que incluso llegan hasta el mar.

Acompañado por el director de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), Rigoberto Laborín Valdez, el mandatario estatal, dialogó con los vecinos, a quienes se les informó que la paraestatal ya contempla un proyecto en esta área.

“Ellos cuentan con dos plantas temporales, pero existe una planta de tratamiento que se hizo en el 2005 y que está descuidada, pero tiene remedio porque está intacta”, detalló el titular de CESPT, entre otras cuestiones técnicas que abordó en el encuentro de este sábado.

Para dar agilidad a la demanda social de estos ciudadanos, el jefe del Ejecutivo estatal, acordó llevar a cabo mañana domingo 5 de julio, una reunión preliminar entre funcionarios y una comitiva de vecinos, para revisar la propuesta de CESPT y el aspecto financiero.

De mismo modo, pidió que se estableciera una estrategia similar a la que se lleva en la colonia Alfonso Ballesteros, donde constantemente se informa a los habitantes los trabajos que se desarrollan en materia de infraestructura y los tiempos de ejecución.

“Tenemos un gran problema nos quejamos de que no hay los servicios, pero no los pagamos y no lo digo por ustedes, por los grandes empresarios que no han querido pagar por los derechos de conexión, pero ya tenemos recuperados 600 millones de pesos para aplicarlos en proyectos, entre ellos la limpieza del canal que hoy (4 de julio) inicia; ya no habrá más derrames hacia el lado americano”, concluyó el gobernador Bonilla Valdez.