MARZO 12, 2019.- El envejecimiento poblacional está marcado por el aumento en el número de personas de edad avanzada; en esta etapa de la vida la alimentación está estrechamente relacionada con la salud, por lo que una nutrición bien orientada es elemental para mantener una buena salud, retrasar algunos cambios del envejecimiento, prevenir enfermedades y ayudar en la recuperación de las mismas, señaló el doctor Óscar Castro Guevara, director de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 38 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en San Luis, Río Colorado, Sonora.
La calidad de vida, determinada por factores económicos, sociales y educativos, se genera también por el estado nutricional de los ancianos, que muy a menudo presentan alteraciones importantes como resultado de una dieta desequilibrada.
En este sentido, los factores agravantes y por lo general contrario a la desnutrición, son el sobrepeso, problemas cardiovasculares, hipertensión, diabetes, así como enfermedades articulares degenerativas y afecciones de la vesícula biliar, entre otras.
Castro Guevara mencionó que la reducción de la estatura es una de las alteraciones más frecuentes de los adultos mayores, ya que se manifiesta a partir de los 50 años y es progresiva desde los 30 hasta los 70.
Aunque por lo común el peso disminuye después de los 65 o 70 años, es importante conocer los cambios normales para evaluar tanto el posible riesgo de desnutrición, como la obesidad.
Señaló que para entender el problema de la desnutrición es importante saber que las personas mayores tienden a comer menos por factores físicos, fisiológicos, sociales y psicológicos, además de los socioeconómicos.
La edad afecta prácticamente todos los órganos y sistemas; el sistema nervioso disminuye las funciones motoras y en el aparato digestivo los cambios son aún mayores, por lo que es fundamental procurar una alimentación balanceada.
El especialista exhortó a la población adulta mayor, como a sus cuidadores, a mantener una alimentación equilibrada y ejercitarse continuamente, de acuerdo a sus posibilidades y los invitó a asistir de manera frecuente con su médico familiar y a los servicios de medicina preventiva para realizarse las revisiones necesarias a su estado de salud.