TIJUANA, OCTUBRE 15, 2018.- En reclamo por un ajuste salarial porque en 13 años no lo han hecho y para exigir mejores condiciones laborales, los trabajadores de los juzgados civiles realizaron una manifestación esta mañana.
El notificador de acuerdos, Ricardo Verdugo Ruiz, explicó que la situación es desesperante pues “lo único que pedimos es que se respete la Ley y esta obliga al empleador por lo menos incrementar el salario en la medida en que crece la inflación y eso no ha sucedido con nosotros en trece años, además de que las condiciones laborales y físicas del inmueble están deterioradas”.
Agregó, que “esta situación es compartida por trabajadores de otras áreas del poder judicial, como por ejemplo, los doctores del Servicio Médico Forense, por ello solicitamos al magistrado Salvador Ortíz Morales, presidente del TSJE, que ponga atención en los empleados que son la base para la impartición y ejecución de la justicia”.
Por su parte, la también notificadora de acuerdos de apellidos Gutiérrez González, añadió que otro de los problemas que enfrentan es la negativa del Poder Judicial para reconocerles el tiempo extra que laboran, pues “tenemos que trabajar en las tardes e incluso los fines de semana porque hay que cumplir las disposiciones de los jueces, pero no nos pagan por el horario extraordinario”.
Esta situación, incluso afecta a quienes pretenden jubilarse puesto que en la respuesta a la demanda que presentó el Tribunal fue claro al contestarle que únicamente le reconocen el horario de ocho de la mañana a tres de tarde, esto pese a que personal homólogo debe entregar las notificaciones judiciales incluso en domingos.
“¿Dónde quedan las horas del juez con las horas inhábiles? Si uno no las cumple ¿qué es lo que va a pasar?”, denunció al indicar que los horarios pagados son de lunes a viernes, de las ocho a las tres de la tarde, pero hay quienes se quedan los fines de semana y no se les toma en cuenta.
En el lugar, el presidente del Colegio de Abogados Emilio Rabasa, Jorge Escárcega, quien acudió en apoyo a los trabajadores, señaló que “no tienen ni para copias” y que “algunos juzgados no tienen ni agua de garrafón”.
Consideró, que “es el colmo, incluso los baños se muestran en vergonzosas condiciones, y cuando personas de otras partes del país, o del extranjero, llegan a las oficinas por problemas legales que sólo pueden ser solucionados en los juzgados, se dan cuenta de la mala imagen que proyecta el edificio”.